La epidemia de nuestro siglo es la obesidad. Así lo señalan las estadísticas; de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) la obesidad se ha extendido y ha alcanzado niveles alarmantes. Cada año mueren como mínimo 2.6 millones de personas por problemas relacionados a la obesidad y el sobrepeso. Más de mil millones de adultos tienen sobrepeso y si no se actúa pronto, las expectativas indican que para el 2015 la cifra superara los 1500 millones.
Más allá de una cuestión de estética, la obesidad es una enfermedad. En ocasiones, no basta con nuestra fuerza de voluntad, es necesario recurrir a los especialistas.
Cuando tenemos un problema de obesidad, a menudo está relacionado con alteraciones que ha sufrido nuestro metabolismo; lo que hace que resulte más difícil la pérdida de peso y que se acumule grasa en zonas de nuestro cuerpo. Parte importante de bajar de peso de forma efectiva consiste en aprender a tener una alimentación saludable y complementar con ejercicio, lo cual favorece nuestro metabolismo y nos ayuda a estar mejor.
Pero si no logramos alcanzar nuestro peso, una buena alternativa es recurrir al control metabólico de la obesidad. A través de la monitorización, el diagnóstico de trastornos que puedan estar afectando nuestra alimentación y el cambio de hábitos guiado por especialistas podemos lograr un equilibrio interno que nos permita alcanzar nuestro peso y mantenernos sanos.
Algunos de los beneficios de lograr este balance son:
- Pérdida progresiva de peso y talla.
- Pierde exclusivamente grasa y mantiene masa muscular corroborable con la composición corporal.
- Glucosas estables, con corrección del estado pre-diabético.
- Disminución del diámetro de cintura.
- Sensación de bienestar y óptima energía.
- Corrección de los niveles de colesterol y triglicéridos.
- Disminución del riesgo de desarrollar hipertensión.
- Disminución del riesgo cardiometabólico
Tomar la decisión de cuidar nuestra salud es el primer paso para tener una mejor calidad de vida y vivir por mucho más tiempo. Los kilos de más no son solo cuestión de imagen. Si queremos un mejor futuro para nosotros y nuestros hijos es hora de empezar a actuar.
