Bienestar

Mitos sobre la salud sexual

Muy frecuentemente, la falta de cuidado en nuestra salud está influenciada por una carencia de información; no es que no nos interese cuidarnos, sino que a menudo no sabemos cómo deberíamos hacerlo –y tememos preguntar– o creemos que sabemos y vivimos en el error. La salud sexual es un tema en el que aún mantenemos muchas reservas y por eso se generan mitos e ideas erróneas. Es por eso que aquí te aclaramos algunos mitos comunes sobre el cuidado de la sexualidad femenina.

Mito: Depilarse antes de ir al ginecólogo

Algunas personas creen que deben depilar su zona genital antes de acudir al ginecólogo; sin embargo, esto no solo es innecesario, sino que puede resultar contraproducente. La depilación puede producir cierta irritación, lo que hace más difícil para el ginecólogo hacer un diagnóstico del estado de salud, ya que no se puede saber si el enrojecimiento tiene algo que ver con una infección o es causa de la depilación. Lo mejor es no depilarse. Recuerda que el vello púbico tiene funciones de protección contra virus y bacterias, por lo que eliminarlo podría hacerte más vulnerable a infecciones.

Mito: La menopausia reduce el deseo sexual

No existe una relación directa entre la menopausia y el deseo; si bien, los cambios hormonales pueden afectar la libido, lo cierto es que son muchos los factores que intervienen en el deseo sexual. El estrés, la depresión, el uso de algunos medicamentos, así como la a forma en que se haya vivido la sexualidad antes de que llegara la menopausia, influyen. Sin embargo, no en todas las mujeres ocurre esto, incluso algunas aumentan su actividad sexual tras la menopausia.

Según un estudio publicado en The Journal Sexual of Medicine, las mujeres que perciben la llegada de la menopausia como algo negativo, son las que suelen ver más afectada su vida sexual, lo que sugiere que es más una cuestión psicológica que biológica.

Mito: Algunas mujeres tienen cólicos más intensos o sangran más, pero es normal

La menstruación no debe ser una tortura. Es normal tener un poco de cólicos, quizá sensibilidad en los pechos o incluso cambios de humor; pero estos síntomas no alteran la vida normal. La menstruación no es una enfermedad, es un proceso natural que no debería afectar nuestra rutina. Cuando los dolores son insoportables, hay nauseas, migraña, palidez y en general malestares que dificultan el desempeño de actividades cotidianas, es necesario acudir al médico.

Mito: Usar duchas vaginales

Las duchas vaginales hacen más daño que bien; alteran el ph y afectan la lubricación natural, por lo que no se recomiendan. Con un jabón neutro y agua tibia es más que suficiente para mantener la higiene íntima.

Estos son sólo algunos mitos, existen muchos más y es necesario estar informados para tener un adecuado cuidado de nuestra salud. Ante cualquier duda, lo mejor es consulta a un especialista.

Escrito por: Elena Pedrozo

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