Escrito por: Revista SuperMujer
Si yo te preguntara hoy: ¿qué te ha dejado el desamor? Posiblemente tu respuesta sea: dolor, sufrimiento y pocas ganas de volverte a enamorar. Tal vez recuerdes la última experiencia que rompió tu corazón. Escuché en la radio que, según estudios recientes de la Universidad de California: “el dolor emocional puede sentirse con la misma intensidad que el dolor físico. Que es factible hablar de la posibilidad de morir por un corazón roto”. Creemos con frecuencia que nada bueno puede traer el desamor a nuestras vidas, sólo dolor intenso.
Para hablar de desamor, es indispensable hacer referencia al amor. Un amor que no existe más y nos dejó frustración y tristeza. Si pudieras, por un instante hacer a un lado la experiencia negativa y te concentras en los buenos momentos, tal vez una sonrisa aparezca en tu rostro. Bien dicen que recordar es vivir y el desamor será el recordatorio de tiempos felices. Te recordará tu capacidad de amar y de entrega. Te recordará que se puede dejar de pensar en uno mismo, para contemplar un nosotros. Te recordará que no puedes ser la misma de ayer, porque gracias a esa experiencia has crecido. De seguro algo has aprendido, pero ¿qué?
Dependerá de ti cómo quieras evaluar esta experiencia dolorosa. Podrás haber aprendido de lo que quieres y no quieres en una relación de pareja. También de lo que estás dispuesta a conceder por alguien. Otro gran aprendizaje podrá ser valorar y respetar tu dolor. Poco se habla de ello. No queremos sentirlo, lo evitamos, lo disfrazamos, lo guardamos debajo de la alfombra. Te has preguntado ¿cuántas cosas hacemos por no sentir dolor? Tampoco se trata de ser masoquista, pero de asimilar el dolor en algunos momentos de nuestra vida. Es como cuando a un hijo que se hizo un raspón y le duele mucho, le dices "no te duele, no llores". Se vale llorar por un desamor. Y una vez asimilado el adiós, empezamos a crecer.
DATE TIEMPO
Es muy común escuchar que un clavo saca otro clavo para así superar una ruptura amorosa. Involucrarse en una relación tras otra para evitar sentir dolor. ¿Por qué no te das la oportunidad de vivir tu duelo y dejarlo fluir? Sin duda, vivirás tu próxima relación mucho más sana emocionalmente y sin asuntos pendientes.
Escrito por: Equipo SuperMujer
