Limpiar la alfombra no es la actividad favorita de muchos. Te sorprendería la cantidad de personas que estarían dispuestas a pagar una buena cantidad por un servicio como este siempre y cuando sea de calidad.
No cualquiera puede dedicarse al negocio del lavado de alfombras, las personas que lo hagan deben ser muy detallistas, casi perfeccionistas, pues requiere de gran dedicación y cuidado. Los clientes suelen ser muy exigentes ya que algunas alfombras son realmente muy costosas, por lo que desean que queden impecables y sin daños.
Tanto las máquinas limpiadoras como los productos a utilizar deben ser profesionales y de primera calidad. Tal vez haga falta que inviertas en una buena aspiradora y productos de limpieza profesionales, pero a la larga seguro que vale la pena.
Es un negocio donde el éxito depende de la calidad de la limpieza. Si los clientes quedan satisfechos tendrás muchos y te pagarán muy bien, además de que te recomendarán con sus amigos y conocidos.
Fuente: Ideas de Negocio
